19/10/23

¿Qué es el smishing y cómo detectarlo?


Los teléfonos móviles se han convertido en un dispositivo indispensable. Sin embargo, conviene estar atentos a su uso, porque los ciberdelincuentes se adaptan a estos avances con nuevas técnicas.
 


¿Qué es el smishing: SMS + phishing?

El smishing es el engaño a través de SMS o mensajes de texto del móvil para conseguir información personal del usuario y hacer un uso fraudulento de ella.

 La diferencia con el phishing es el medio por el que se hace la estafa; en el phishing es principalmente a través de correo electrónico y en el smishing se hace con SMS y Whatsapp (y Facebook).
El objetivo de estos mensajes es obtener información confidencial, como claves o datos bancarios, y/o para vender productos inexistentesEnvían un SMS al usuario con una promoción irresistible, la posibilidad de conseguir un premio o, simplemente, un aviso de una empresa de mensajería o de una entidad bancaria.Si se pincha en el mensaje, el usuario es dirigido a una página web fraudulenta que, bien imita a la original para robar sus datos bancarios o sus contraseñas, bien contiene código malicioso para instalar algún malware, bien engaña al usuario para que se instale una aplicación que recopilará y enviará información confidencial a terceros.También es habitual el envío de mensajes que piden que se llame a un número de teléfono de tarificación especial o suscribirse a un servicio SMS premium que supone un gasto adicional.

¿Cómo puedes evitar el fraude?

El Banco de España da una serie de recomendaciones para evitar el fraude del smishing.

  • Desconfía de los mensajes de remitentes desconocidos

  • También de aquellos con faltas de ortografía, en inglés o que parezcan una mala traducción del inglés, así como de las promociones o mensajes de empresas o servicios que no has utilizado con anterioridad.


  • Nunca facilites la información que pide el mensaje

    Especialmente cuando se trata de datos personales o bancarios.
  • No pinches en los enlaces

    Ni descargues archivos adjuntos.
  • Bloquea los mensajes de texto que consideres spam

    Así no volverás a recibirlos más.
  • Verifica el remitente

    Muchas veces suplantan la identidad de un contacto o empresa conocida. Si tienes dudas del mensaje, haz una búsqueda rápida en internet con su contenido para descubrir si es una estafa o escribe a tu contacto por otro canal (un correo, otra app de mensajería…) o llámale para confirmar que el mensaje es suyo.
  • Evita guardar sin cifrar claves o información bancaria en el teléfono

    Como en un contacto o en la aplicación de notas.
  • Personaliza la seguridad, con contraseñas seguras y doble verificación

    Tanto del móvil como de la banca electrónica.
  • Recuerda que el banco nunca te pedirá por SMS que facilites tus claves de acceso al completo

    Ni tampoco los datos de tu tarjeta.

¿Qué hacer si eres víctima de smishing?

Si a pesar de tomar todas las precauciones crees que has podido ser víctima de un mensaje fraudulento, lo primero que debes hacer es ponerte en contacto con la entidad financiera para que bloquee la operación.En segundo lugar, debes modificar la contraseña de acceso a la banca electrónica y cualquier otra información que hayas facilitado. Y, sobre todo, debes denunciar el fraude a la Policía Nacional, la Guardia Civil o en los juzgados, aportando las pruebas pertinentes.Si recibes un mensaje como “Felicidades, has sido premiado con .... Envía un SMS a este número” o “Estimado cliente, su tarjeta o su suscripción ha sido bloqueada. Para desbloquearla visite esta web y complete los pasos”, ¡desconfía!

26/9/23

El silencio de los corderos … eléctricos

 

En los recibos de la luz, desde junio de 2023, aparece un nuevo concepto: “Facturación por financiación del bono social”.

A este concepto se le aplica el “Impuesto especial sobre la electricidad” y a ambos el IVA.

Ningún partido político, agente social o colectivo ha hecho ninguna valoración ni ha dado explicaciones al respecto, y los consumidores de a pie estamos tan acostumbrados a no entender las facturas (del PVPC o del Mercado Libre) que en la mayoría de los casos aún no somos conscientes del nuevo recargo, pese a la Nota Informativa de las comercializadoras a sus clientes.

La Orden TED/81/2023 del Ministerio que lo establece se publica el 27 de enero y la Memoria justificativa de la propuesta de Orden es de 28 de diciembre de 2022 y, al tratarse de un acto administrativo, se somete a audiencia de los sujetos obligados a la financiación del bono social; a saber y según el art. 45 de la Ley 24/2013: los sujetos del sector eléctrico que participan en las actividades destinadas al suministro de energía eléctrica, incluyendo la producción, transporte, distribución y comercialización de energía eléctrica, así como los consumidores directos en mercado, rehenes pasivos involuntarios.

En cuanto a los consumidores ni administraciones ni organizaciones “representativas” han ejercido su responsabilidad In Vigilando para cuestionar esta nueva subida en la factura.

Ya en el RD897/2017 las Administraciones Públicas NO se consideran sujetos obligados a financiar el bono social, ni el coste de la cofinanciación del suministro de los consumidores en riesgo de exclusión social, trasladando al consumidor el coste de esta Política Social; directamente con un nuevo concepto a pagar e indirectamente al repercutir las empresas eléctricas su parte en el precio al cliente.

El consumidor doméstico además de este nuevo concepto paga el “Impuesto especial sobre la electricidad”, cuyo hecho imponible es el suministro de electricidad a persona o entidad que la adquiere para su propio consumo, que las empresas eléctricas repercuten separadamente en factura.

El concepto “energía” de la factura incluye, entre otros, el coste de la energía en el mercado, los pagos por capacidad y la retribución a REE y OMIE.

Los peajes retribuyen las redes de transporte y distribución.

Los cargos incluyen fundamentalmente el RECORE (retribución a las renovables, cogeneración y residuos), las anualidades del déficit y el sobrecoste de generación en  territorios no peninsulares.

 

el Real Decreto-ley 9/2013  garantiza la estabilidad financiera del sistema eléctrico fijando el concepto de ¿Rentabilidad Razonable? e incluso cuantificándola en su mínimo garantizado, pero sin límites superiores como las cuentas de resultados de las empresas demuestran, y el eufemismo de “beneficios caídos del cielo” hace sospechar.

El principio de sostenibilidad económica y financiera del sistema eléctrico es un principio rector de las actuaciones de las Administraciones Públicas y demás sujetos del sistema para evitar que aparezcan nuevos “deficits de tarifa” como los que llevamos años pagando en factura.

Se mantiene la financiación de los costes del sistema por parte de los consumidores mediante el pago de los peajes de acceso a las redes y el resto de cargos, así como, mediante otros instrumentos financieros, y, excepcionalmente y para los supuestos específicamente previstos, mediante las partidas provenientes de los Presupuestos Generales del Estado.

Puede parecer que entre las administraciones y las empresas eléctricas existe un serio conflicto de intereses, si nos fiamos de algunas escaladas verbales y mediáticas y diversas medidas “regulatorias” que aparentan favorecer al consumidor, cautivo del oligopolio eléctrico, pero que finalmente se “revierten” en los tribunales, con reflejo invariable en nuestras facturas más IVA.


Existe una extensa red clientelar entre las empresas energéticas, sus accionistas y los cargos políticos de la administración y la cascada de agentes sociales dependientes del presupuesto, lo que explica el largo silencio de los corderos.